Cada foto tiene su historia

En junio de 2008 hicimos un viaje a los Parques Naturales del Norte de Guadalajara, en busca de los paisajes de primavera.

Subimos al Pico del Lobo desde el puerto de la Quesera en el límite con Soria. Visitamos el Hayedo de Tejera Negra, después estuvimos en Pelegrina y el Barranco del Río Dulce, donde Felíx Rodriguez de la Fuente estuvo grabando El Hombre y la Tierra, y finalmente recorrimos el Alto Tajo.

Os voy a contar como se hicieron estas fotos de los campos de amapolas en Pelegrina, porque conocer la historia que hay detras de cada fotografía es importante para aprender. Lo primero fué decidir la època del viaje para encontrar paisajes interesantes. Llegamos a Pelegrina a útima hora de la tarde y nos sorprendio este paisaje de amapolas. Con las últimas luces, solo pude tomar unas pocas fotos y decidí volver a primera hora del día siguiente. Con la luz de la mañana cambó el paisaje como es logico. Me situé en lo alto del barranco desde donde la visión era perfecta, y con el teleobjetivo zoom 80-200 disfruté mucho componiendo diferentes fotografías. El paisaje hablaba por si solo, solo había que decidir los encuadres, que no fué facil, entre otras cosas porque el panorama erá tan precioso que la emoción llega a bloquerate un poco y no sabes donde apuntar hasta que no te has serenado.

Fué esencial volver con las primeras luces de la mañana.
También tener un teleobjetivo por lo menos de 200 mm. y si se puede un duplicador.
Un tripode
Disparar con velocidades de obturación mayores de 1/250 para evitar trepidación (foto movida) aunque disparemos sobre el trípode.
No utilicé el polarizador porque los colores ya estaban bastante saturados, y también en el revelado puedes saturarlos más y darles un poco de contraste.

por la tarde